Gran parte de nuestra vida gira en torno a las conversaciones que tenemos con las personas que nos rodean. Buenas conversaciones fortalecen las relaciones familiares, amistades y potencian nuestro desarrollo laboral. Las malas conversaciones generan malentendidos, enfados, resentimientos y todo tipo de problemas con las personas que convivimos a diario.
Escuchar activamente a la otra persona nos ayuda a que se sienta comprendida, valorada y escuchada. Esto es importante en todas las conversaciones, pero especialmente si la otra persona se siente mal y necesita desahogarse.
● Cuando dedicamos toda nuestra atención a escuchar y comprender a otro ser humano SI le damos espacio para que pueda expresarse, respetamos sus silencios, nos esforzamos por comprender, mostramos consideración, amabilidad y empatía.
●Cuando dedicamos toda nuestra atención a escuchar y comprender a otra persona, NO le interrumpimos, cambiamos de tema, juzgamos, aconsejamos desde nuestra experiencia, tomamos el protagonismo para darle nuestras opiniones o contarle nuestras vivencias.
Hay varias formas de mostrarle a la otra persona que le estamos prestando toda nuestra atención y que nos importa, vamos a mencionar algunas de ellas:
1) Espejar: Cuando hacemos de espejo, reflejamos lo que la otra persona nos ha comunicado. Puede utilizarse para confirmar que has estado escuchando con atención, para avanzar en la conversación, para aclarar una duda o para ayudar a la otra persona a mover su foco de atención.
Ejercicio: Reflexiona sobre las respuestas de este padre a su hijo y elige las que te parezcan mejor.
Hijo: Papá, hoy estuvimos jugando al fútbol en el colegio y los amigos me pusieron en la portería porque dicen que no sirvo para nada.
Papá 1: Ahora no hijo, ¿Qué no ves que estoy viendo mi serie favorita?
Papá 2: Entonces jugaron al fútbol y te tocó en la portería ¿Qué tal te sentiste en el partido?
Papá 3: Que mal que te pusieron de portero, debes esforzarte más para poder jugar de delantero.
Papá 4: Que feo que dijeran que no sirves para nada, seguro si hubieran jugado baloncesto serían ellos los que no sabrían jugar, porque tu eres muy bueno en eso.
Papá 5: Entonces aunque te dijeron que no servías para nada, fuiste capaz de dar tu mejor esfuerzo en la portería. Wow, eso es impresionante. ¿Y cómo te fue en el partido?
Como podemos ver, hay diferentes respuestas según cada padre y tú ¿Con cuál te identificas?
En el siguiente artículo veremos a profundidad varios ejemplos de lo que es y no es escucha activa.
2) Identificar Emociones: Cuando tratamos de identificar la emoción tras el mensaje que la otra persona nos está mandando, le mostramos que nos importa como se siente y que nos importa.
Incluso si no acertamos con la emoción, la otra persona sentirá que nos estamos interesando por ella.
3) Mostrar Empatía: Mostrar nuestra empatía hacia las personas que nos rodean, ayuda a que se sientan acompañados en sus sentimientos. Trata de no juzgar o buscar soluciones. Imagina cómo te sentirías tu si estuvieras en su situación.
Incluso si la otra persona está experimentando la situación desde un punto de vista con el que no estás de acuerdo, trata de conectar con ella y tómalo como una oportunidad para comprender otras perspectivas.
4) Resaltar lo bueno: Reconocer los logros y avances de la otra persona ayuda a que se sienta más animada y valorada. A menudo las personas pasan por alto las cosas buenas de sus vidas y se enfocan en lo negativo.
Sin dejar de empatizar con sus emociones, podemos ayudarles a sentirse mejor dándoles un poco de reconocimiento. Vamos a ilustrarlo con un ejemplo.
Escuchar de forma activa a los demás es muy sencillo de practicar, el mundo está lleno de seres humanos diferentes, pero todos tienen una cosa en común: Desean ser escuchados y comprendidos
Mundo Unicornio es un lugar donde puedes ser tú mismo, divertirte y aprender muchas cosas.
Haydeé Acosta
Psicóloga en formación
Mamá embajadora de Mundo Unicornio
